El colectivo de trabajadoras y trabajadores de la cultura difundieron una carta abierta a la opinión pública para hacer conocer la realidad crítica por la que atraviesa el sector.
Esta noche debía tratarse en la Cámara de Diputados un proyecto de emergencia cultural, pero el mismo no fue incluido en el acta de labor parlamentaria.
El músico Carlos Vargas confirmó a El Influencer que el diputado Héctor Chibán en reunión de comisión legislativa gestionó para que el próximo martes el proyecto sea tratado.
Carta abierta:
Queremos expresar nuestra profunda preocupación frente a la situación desesperante e incierta que atravesamos los trabajadores y trabajadoras de la Cultura desde hace cinco meses.
Antes de la pandemia ya éramos un sector precarizado, desprotegido y de ingresos intermitentes, pero esta crisis sanitaria dejó totalmente expuesta nuestra situación de fragilidad laboral, tributaria y de cobertura social.
Somos trabajadores y trabajadoras de la Cultura sin ingresos, músicos sin escenario, bailarines sin público, actores sin teatros, artesanos sin turistas que compren nuestros productos, y centros culturales a punto de cerrar.
Somos la Cultura de Salta y como representantes de ella nos hemos reunido con la Secretaría de Cultura provincial, con quienes nos representan en la Legislatura Provincial y aún no obtenemos respuesta alguna.
Hemos trabajado en un proyecto de Ley de Emergencia Cultural junto a algunos legisladores que han escuchado las necesidades del sector, pero el resto de los diputados se niega a tratarla en sesión.
Por ello es que solicitamos el apoyo de nuestra comunidad. Somos parte de la identidad de esta tierra, y conformamos un paisaje cultural diverso y de calidad, reconocido tanto dentro de nuestro país como en el exterior. No somos simplemente entretenimiento. Somos familias enteras que vivimos de la producción cultural, y nuestras producciones son a su vez generadoras de miles de fuentes de trabajo.
Somos conscientes que la crisis sanitaria que vivimos hizo necesario el cese de nuestras actividades. Pero nunca entendimos ni entenderemos porqué se podían abrir bares y misas, pero no teatros y espacios culturales. En una sala de teatro es mucho más fácil respetar el distanciamiento social con los respectivos protocolos que en otros espacios de recreación.
Necesitamos que la comunidad nos ayude a luchar contra la indiferencia de nuestros funcionarios y funcionarias y su falta de gestión e interés en nuestra problemática. No podemos esperar a que termine la pandemia para que decidan sentarse a pensar en reactivar nuestra industria cultural. Para entonces muchas familias, proyectos culturales y pequeñas empresas y trabajadores y trabajadores independientes de la Cultura, nos habremos extinguido.
La Cultura es un derecho, y los funcionarios y funcionarias tienen la responsabilidad política de garantizar que el entramado cultural no se resquebraje de forma irreparable como consecuencia de una crisis sanitaria. Deben tomar medidas urgentes para mitigar las consecuencias de esta crisis ya que no podremos tener ingresos hasta que no regresen los teatros, los espectáculos y el turismo.
El sector cultural de la Provincia necesita una gestión específica y un presupuesto más equitativo en relación a otros sectores productivos. El presupuesto actual para el área de Cultura cuenta con un 30% de recorte en relación al presupuesto anterior y eso es gravísimo.
Una Provincia que se jacta de su legado y patrimonio cultural, no puede abandonar a su suerte a quienes la producen.
Pedimos a nuestro público, y a toda la comunidad, que se sumen a nuestra lucha para que la Cultura de Salta no siga cayendo en picada. Necesitamos una Ley de Emergencia Cultural ya. Que la Provincia resguarde a los trabajadores de la Cultura.
Artistas por la Ley de Emergencia Cultural.