La propuesta presentada ayer por el presidente Alberto Fernández busca extender el servicio de internet de banda ancha a todo el territorio y para eso se pondrá en órbita un nuevo satélite construido con mano de obra y tecnología nacional.
El Plan Conectar prevé universalizar el acceso a los servicios TIC y a las conexiones de banda ancha de última generación. Comprende el relanzamiento de la industria satelital nacional y la TDA, entre otros puntos.
Tendrá una inversión por $37.900 millones para potenciar la estructura de comunicaciones, a fin de alcanzar la «universalización del acceso a los servicios TIC y a las conexiones de banda ancha de última generación» de los habitantes.
Desde Bariloche, el presidente de Arsat, Pablo Tognetti, anunció que «se va a desarrollar un satélite geoestacionario de comunicación denominado ARSAT-1 segunda generación, que va a brindar banda ancha en todo el país y contará con la moderna propulsión eléctrica». Se universalizará el acceso a las conexiones de banda ancha y se prevé la reactivación del Plan Satelital Argentino.
Al referirse al nuevo satélite, en la presentación informaron que se trata de, el primero de la segunda generación de Arsat, que estará orientado a la ocupación de las posiciones orbitales de la Argentina y al desarrollo de la industria satelital de telecomunicaciones.
Otra de las finalidades de la iniciativa es reducir la brecha digital, brindando conectividad satelital de alta calidad a 200.000 hogares rurales.
Además, se actualizará y extenderá hasta los 38.808 kilómetros la Red Federal de Fibra Óptica, se renovarán los equipos de las 100 estaciones de la Televisión Digital Abierta (TDA) y se pondrá en valor el Centro Nacional de Datos de Arsat, que permitirá disminuir costos y ahorrar divisas en servicios de nube.