Lino Abdemar Moreno, uno de los condenados a perpetua por el brutal crimen de la productora rural de Salvador Mazza, Liliana Ledesma, aprovechó una salida transitoria y se fugó.
Uno de los asesinos de la productora rural que acusó a los hermanos Castedo por narcotráfico aprovechó una salida transitoria obtenida a sólo 13 años de haber sido condenado a cadena perpetua, se fugó del penal de Orán y no hay pistas ni rastros de su paradero.
Lino Ademar Moreno había sido autorizado a salir un domingo al mes por parte del Juez de Ejecución, Edgardo Laurenci, y el mismo magistrado decidió ampliar ese beneficio hasta que un día no volvió. Según dejaron transcender, el sicario fue retirado por un tío y éste volvió solo y avisó que se había fugado.
Desde ese momento, la policía montó un operativo de búsqueda por considerarlo en sujeto peligroso, sin embargo, no hay datos ni pistas sobre su paradero.
En 2010, la justicia salteña condenó a los autores materiales del crimen de Liliana Ledesma a perpetua. Además de Moreno, fueron sentenciados María Gabriela Aparicio, hermana del ex diputado justicialista Ernesto Aparicio, Aníbal Tarraga y Casimiro Torres.
En las audiencias de ese debate quedó claro que el ataque contra Liliana Ledesma había sido ordenado por los hermanos Castedo, y el entonces diputado provincial, José Ernesto Aparicio (fallecido en 2013, sin ser investigado). Por escuchas telefónicas que habían sido ordenadas años antes en una causa en la que se los investigaba por narcotráfico, se supo incluso que los autores materiales habían recibido un pago de $20.000 para cometer este crimen.
Todos cumplían prisión perpetua por haberle asestado siete puñaladas a Liliana Ledesma e , incluso, haber dejado un mensaje mafioso tras cortarle los labios de arriba a abajo como señal de silencio.
En ese entonces, el Juzgado Federal, a cargo de Raúl Reynoso, se negó a unificar las causas vinculadas a los hermanos Castedo y el crimen de Ledesma tras conocerse escuchas que advertían sobre el asesinato. Esa medida permitió que los Castedo tengan un plazo de 48 horas para escapar de Salta.
Tras largos años prófugos, los Castedo fueron detenidos y condenados por narcotráfico pero la justicia salteña todavía no puede abrir el juicio por la supuesta autoría intelectual del crimen de Liliana Ledesma.
De hecho, mientras el sicario se fugaba del penal, el Tribunal integrado por los jueces, Edgardo Laurenci (presidente), Raúl Fernando López y Claudio Alejandro Parisi (vocales), suspendía por séptima vez el juicio.