Naciones Unidas y los gobiernos locales advirtieron sobre el riesgo que enfrentan los países insulares como consecuencia del cambio climático. En qué situación se encuentra cada una
El cambio climático, que ha sido generado por actividades humanas, amenaza la existencia de muchas naciones insulares. Esa situación podría llevar a que algunos países lleguen a punto de casi desaparición. “Una catástrofe mundial está poniendo en peligro este paraíso del Pacífico”. Así lo advirtió, durante la presentación de un informe, el secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, y la secretaria General de la Organización Meteorológica Mundial, la científica argentina Celeste Saulo, en el Foro de las Islas del Pacífico celebrado en Tonga, que es un país de Oceanía.
“El nivel medio global del mar está subiendo a un ritmo sin precedentes. El océano se está desbordando”, resaltó Guterres, quien también apuntó a la causa de esta situación: “La razón es clara: los gases de efecto invernadero generados en su inmensa mayoría por la quema de combustibles fósiles están cocinando nuestro planeta. Y el mar está soportando el calor, literalmente”.
A pesar de que solo representan el 0,02% de las emisiones mundiales, las islas del Pacífico están especialmente expuestas. Su altitud media es de apenas uno o dos metros sobre el nivel del mar; el 90% de la población vive a menos de 5 kilómetros de la costa y la mitad de las infraestructuras están a menos de 500 metros del mar, explicó Guterres. Pero el problema es mundial.
De acuerdo con un trabajo colaborativo entre el centro de investigación estadounidense Woods Hole Oceanographic Institution y la Union of Concerned Scientists (UCS) se conoció el listado de islas paradisíacas que están amenazadas.
Uno de los factores que está detrás de la subida del nivel del mar es el deshielo de las capas de hielo continentales. Esa alteración podría sumergir islas que ya están más bajas. Aunque hay otras cuya situación podría agravarse, las que se encuentran en mayor peligro son:
- Islas Maldivas
- Islas Marshall
- La Polinesia Francesa
- Vanuatu
- Nueva Caledonia
- Papúa Nueva Guinea
- Tuvalu
En el caso de las Maldivas, están formadas por 1.200 pequeñas islas en el océano Índico. Allí viven 540.000 personas. Esa nación insular forma el país más llano de la Tierra, con una elevación media de apenas 1 metro.
Los investigadores de la Union of Concerned Scientists (UCS), de Estados Unidos, comentaron, en diálogo con National Geographic, que “si Maldivas sufriera una subida del nivel del mar de tan solo 45 centímetros, perdería alrededor del 77% de su superficie terrestre en el año 2100, algo que podría ocurrir incluso antes”.
Otra problemática también enfrenta Tuvalu, una nación en medio del Pacífico Sur formada por un grupo de nueve atolones y hermosas islas de coral. Tuvalu tiene poco más de 11.000 habitantes, pero está prácticamente “condenada”. Esta nación conmocionó al mundo en 2021 cuando su ministro de Asuntos Exteriores, Simon Kofe, apareció en un vídeo con traje y corbata en medio del mar, advirtiendo y pidiendo a los líderes mundiales que tomaran medidas contra el cambio climático.
Esa isla tiene una doble amenaza: el calentamiento global y el consiguiente deshielo de los casquetes polares y los glaciares. Además de la subida del nivel del mar, el país se ve cada vez más castigado por fenómenos meteorológicos más frecuentes y severos, como ciclones y tormentas, según un artículo publicado en el sitio web del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Se calcula que en 2050 la mitad de la isla más grande de Tuvalu, Fongafale, estará inundada por las mareas. Si no se toman medidas, el 95% del territorio quedará inundado por las habituales mareas altas en el año 2100. Según el PNUD, el cambio climático supone un riesgo para las infraestructuras, la seguridad alimentaria y el suministro energético.
En tanto, las Islas Marshall están formadas por atolones coralinos e islas con arrecifes dispersos, que se extienden a lo largo de más de 370 kilómetros de costa en más de 1.200.000 km² del Océano Pacífico central. Dispuestas en dos cadenas paralelas, el Arco Ratak al este y el Arco Ralik al oeste, solo algunos de los atalones e islas están habitados, mientras que las demás áreas permanecen deshabitadas. Las islas se encuentran en la trayectoria del cinturón de tifones.
La Polinesia Francesa, situada en el sur del Océano Pacífico, es conocida por ser un paraíso tropical. En la isla de Tahaa, se destaca la producción de vainilla, lo que impregna el aire con su distintivo aroma. Además, esta zona de ultramar cuenta con una infraestructura hotelera lujosa y ofrece una amplia gama de actividades acuáticas que atraen a turistas de todo el mundo.
A su vez, Vanuatu es un Estado insular en el Pacífico sudoccidental, en Oceanía, compuesto por el archipiélago volcánico de las Nuevas Hébridas. Este conjunto de aproximadamente 40 islas tiene en Espíritu Santo su isla más grande. El terreno de las islas principales es volcánico y predominantemente montañoso, con llanuras costeras estrechas. La mayor parte de la superficie de Vanuatu está cubierta por bosques salvajes, mientras que una parte menor está destinado a cultivos y a propiedades privadas.
El clima subecuatorial de Vanuatu se caracteriza por ser cálido y tener elevadas precipitaciones. La población, principalmente melanésica, se concentra en las tres islas más grandes: Efate, Espíritu Santo y Malekula.
Nueva Caledonia, ubicada en el Pacífico sudoccidental a unos 1.500 kilómetros al este de Australia, es un paraíso natural que se destaca por sus playas de arena blanca, aguas cristalinas y una impresionante barrera de coral. Su belleza virgen se complementa con una rica diversidad cultural, lo que la convierte en un destino ideal para quienes buscan un entorno único y auténtico. Grande Terre, la isla principal que abarca el 90% del territorio, es el punto de partida para explorar la región. No obstante, las islas Loyauté, como Lifou y Ouvea, también ofrecen paisajes impresionantes.
Por otro lado, Papúa Nueva Guinea es un país insular ubicado en el océano Pacífico occidental, en el límite entre el sudeste de Asia y el oeste de Oceanía, al este de Indonesia. Está compuesto por la mitad oriental de la isla de Nueva Guinea, el archipiélago de las Islas Salomón occidental, que incluye la isla de Bougainville, y el archipiélago Bismarck, conformado más de 600 islas dispersas en los mares de Bismarck y Salomón.
Frente a los problemas de los Estados insulares, los líderes de los países del Pacífico fueron recibidos el lunes en su reunión anual en Nuku’alofa, Tonga. Fue un encuentro que puso de relieve la tensión que existe en el centro de un acontecimiento que antes apenas captaba la atención del mundo y ahora atrae a delegaciones de docenas de países de todo el planeta.
Fundado en 1971, el Foro de las Islas del Pacífico reúne a 18 Estados miembros para debatir y coordinar respuestas a los problemas a los que se enfrenta una región remota y diversa, que sabe que sus países con poblaciones tan pequeñas, como 1.500 habitantes, atraen más atención en la escena mundial cuando hablan con una sola voz.
Sus líderes son de las naciones insulares del Pacífico, algunas de las más amenazadas por la subida del nivel del mar, así como de Australia y Nueva Zelanda. Ya llevan mucho tiempo a la vanguardia de la lucha contra el cambio climático.
Durante las primeras décadas de existencia del foro, las reuniones anuales de sus líderes pasaron desapercibidas. En los últimos años, esto ha cambiado, según los asistentes habituales al foro: la campaña china de ayuda, diplomacia y acuerdos de seguridad con líderes de todo el Pacífico ha impulsado una rápida expansión del tamaño y el alcance de la organización y sus reuniones, de acuerdo con la agencia de noticias AP. La cumbre de esta semana cuenta con la mayor delegación china de la historia del foro y una importante delegación estadounidense, encabezada por el Vicesecretario de Estado Kurt Campbell.
Fuente: Infobae