Con ayuda de gobernadores, el oficialismo logró impedir que se llegara a los 133 legisladores necesarios para dar inicio a la sesión.
El oficialismo logró los apoyos necesarios para hacer caer la sesión especial de este miércoles en la Cámara de Diputados, en la que estaba previsto tratar diferentes proyectos incómodos para el Gobierno de Javier Milei, entre ellos el aumento de las jubilaciones y del bono de quienes cobran el haber mínimo, la continuidad de la moratoria previsional o la creación de una nueva categoría que permita acceder a una jubilación proporcional a los años de aportes realizados al sistema, la declaración de emergencia para los municipios bonaerenses afectados por las últimas inundaciones y la designación de auditores en la Auditoría General de la Nación (AGN). También logró bloquear la elección de autoridades para la comisión investigadora de $Libra.
«Siendo las 12.31, habiendo fracasado la sesión convocada en los términos del artículo 35 del Reglamento, esta presidencia autoriza expresiones de minoría conforme al artículo 36 bis del mismo», dijo el titular de la Cámara, Martín Menem, cuando constató que no había quórum para dar inicio a la sesión, que requiere de 129 diputados presentes, mientras que este miércoles el tablero marcó 124 presencias y 133 ausencias, muchas aportadas por los gobernadores Raúl Jalil (Catamarca), Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Martín Llaryora (Córdoba).
El primero en tomar la palabra tras el fracaso de la sesión fue el jefe de bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez. «Hoy queríamos traer aquí a este recinto un debate fuerte sobre el tema de las jubilaciones en la Argentina. Queríamos y queremos prorrogar la vigencia de la moratoria previsional, actualizar el bono que sigue congelado en $70.000, darle un aumento a todas las escalas de las jubilaciones, y que las 13 cajas de jubilaciones provinciales que no han sido transferidas a la Nación puedan contar con los recursos que necesitan para su financiamiento. Y a partir de este no quórum al menos en esta sesión no va a ser posible», lamentó.
«Sería bueno que nos preguntemos si somos capaces de hablarles, de mirarlos a los ojos, a los jubilados y jubiladas que en la cola de cualquier supermercado de la Argentina llenan la bolsita, el changuito, y cuando llegan a la caja tienen que andar viendo qué alimento dejan en la caja porque no pueden terminar de pagar la cuenta», planteó Martínez, y continuó en el mismo sentido: «Si somos capaces de mirarlos a los ojos a los jubilados y jubiladas que cuando van a las farmacias tienen que andar eligiendo porque no cuentan con la gratuidad de remedios que tenía garantizado el PAMI y no cuentan con los recursos económicos para pagarlos. Ni que hablar de los jubilados o jubilados que pagan alquileres o que inclusive están teniendo a su cargo hijos o hasta nietos desocupados que necesitan volver a la casa de sus padres o abuelos para poder tener un techo para dormir».
En su intervención, Martínez también cuestionó al oficialismo por el escándalo $Libra, ya que el Ejecutivo no solo disolvió por decreto la Unidad de Tareas que había creado para autoinvestigarse -sin haber difundido un solo resultado- sino que a última hora del martes Martín Menem dejó fuera del temario oficial la constitución de la comisión investigadora, una jugada que fue interpretada por la oposición como una nueva maniobra para bloquear su tratamiento y que va a contramano de lo exigido por la Cámara de Diputados durante la interpelación al jefe de Gabinete, Guillermo Francos. «Intentaron en una maniobra artera que el tema $Libra no esté en el temario de esta sesión y obligar a hacer una moción especial yendo más allá de las atribuciones que tiene el presidente de la Cámara», sentenció el jefe de bloque de Unión por la Patria.
«Esta sesión se cae en un contexto donde el Gobierno gana la Ciudad de Buenos Aires e interpreta que ese triunfo es en favor de más impunidad», lamentó en el mismo sentido Pablo Juliano, diputado de Democracia para Siempre, al repudiar el cierre por decreto de la Unidad de Tareas de Investigación (UTI) que había creado el Gobierno en el ámbito del Ministerio de Justicia para juntar información vinculada con el escándalo $Libra.
Respecto a la falta de quórum, Juliano dijo que siente una «profunda frustración» al «compartir bancas con colegas que están mirando para el costado de situaciones que son complejas», como el bajo poder adquisitivo de los jubilados y jubiladas y la situación que atraviesan distintos distritos bonaerenses tras el temporal de tormentas.
«Lamentablemente pagan los platos rotos los jubilados, pagan los platos rotos la cantidad de distritos de la provincia de Buenos Aires que están abajo del agua, paga los platos rotos en definitiva la búsqueda de que exista equilibrio y se pongan en marcha los organismos de control. El Gobierno pareciera que tiene urticaria a la auditoría, le tiene miedo, no quiere el control. Y eso hay que decirlo, sino no se explica porqué hoy a la mañana se convocó a la comisión de asuntos constitucionales para reformar la ley de auditoría general de la nación», protestó Juliano, una lectura que compartieron varios de los legisladores de la oposición que hablaron durante las expresiones en minoría.
Entre los diputados que este miércoles bajaron al recinto con la intención de dar quórum se cuentan la mayoría de los legisladores de Unión por la Patria, la izquierda, 11 diputados de Encuentro Federal, la Coalición Cívica, 10 de Democracia para Siempre, el radical Julio Cobos y Sergio Acevedo de Por Santa Cruz.
En cambio, no habilitaron el quórum los diputados de Córdoba Carlos Gutiérrez, Ignacio García Aresca y Alejandra Torres, que responden al gobernador Martín Llaryora, el chubutense Jorge Ávila, dos diputados de Democracia para Siempre, y 6 legisladores de Unión por la Patria, quienes no pudieron llegar al Congreso a tiempo. La Libertad Avanza, la UCR y el PRO, en tanto, ya habían anticipado que no iban a bajar al recinto.