El estupefaciente y la mercadería de contrabando eran transportados en diferentes vehículos pero, al notar la presencia de los gendarmes, se dieron a la fuga en medio del monte.
Integrantes del Escuadrón 20 “Orán”, mientras efectuaban controles vehiculares sobre la Ruta Nacional N° 50, a la altura del sector denominado “Agua Linda”, observaron a varios automóviles que hicieron caso omiso a las señales de detención, y a 300 metros realizaron una maniobra brusca en “U” y huyeron.
Durante la persecución, los gendarmes divisaron que los ocupantes de los rodados descendieron con bultos sobre sus espaldas y se introdujeron en la vegetación.
Tras un intenso rastrillaje por el lugar, hallaron abandonados dos bultos que contenían 178 cartones de cigarrillos, 64 “ladrillos” con una sustancia blancuzca y otros tres bultos con hojas de coca.
A los efectos de resguardar los elementos encontrados, los gendarmes procedieron a trasladar el procedimiento al asiento de la Subunidad para efectuar el pesaje y el conteo de los mismos. Allí, efectivos de Criminalística y Estudios Forenses realizaron las pruebas de campo Narcotest, las cuales arrojaron resultado positivo para cocaína con un peso total de 66 kilos 200 gramos.
Además, el personal de la Fuerza decomisó un total de 1.780 atados de cigarrillos de origen extranjero y 20 kilos de hojas de coca, en infracción a la Ley N° 23.737 y Ley N° 22.415, por orientación de la Fiscalía Federal de Tartagal.