Volvió a mostrar una deslucida actuación y perdió de visitante ante Unión de Santa Fe. Peñailillo convirtió el único gol del encuentro.
Boca sufrió su segunda derrota en la Copa de la Liga profesional: tropezó 1-0 ante Unión en Santa Fe. El chileno Nicolás Peñailillo anotó el único gol del encuentro en el segundo tiempo. Y el Xeneize, con pocas ideas, jamás le encontró la vuelta al planteo granítico del Tatengue, que consiguió festejar de local contra el elenco de la Ribera por primera vez en 18 años.
El conjunto auriazul asumió la iniciativa buscando progresar desde los buenos pies en su mediocampo, pero se encontró con un Unión organizado y con un esquema espejo (cinco hombres en el fondo), que propuso recién empezar a presionarlo cuando Boca atravesó la línea de la mitad de cancha, con máxima concentración, bloqueando las combinaciones ofensivas visitantes.
El Tatengue debió haberse visto beneficiado por un tiro penal: Buffarini amplió volumen con uno de sus brazos ante un remate local, pero el árbitro Espinoza no observó la infracción. Con sus formas, ambos elencos comenzaron a llegar. Unión, con un tiro libre que contuvo Andrada. Los orientados por Russo, con un centro de Fabra que conectó Buffarini en la otra banda por encima del travesaño.
La lesión de Marcos Rojo (molestia en un isquiotibial) le abrió a Russo la posibilidad de un cambio táctico: abandonó la línea de 3/5 en el fondo e hizo entrar a Soldano en busca de peso ofensivo. Sin embargo, a los 4 minutos, la defensa ofreció una grieta que no fue perdonada: el chileno Peñailillo remató junto a un palo y puso el 1-0 para el local.
Casi inmediatamente, el DT visitante volvió a mover el banco: le dio minutos a Mauro Zárate, quien se había destacado en las prácticas semanales, en lugar de Cardona, intermitente. El “nuevo partido” mostró a un Boca que empujó, a veces apostando en exceso a la acción individual o a la búsqueda de Soldano, y a un Unión que, lanzado de contra, dejó la sensación de que, con una pátina de precisión, estaba a tiro del segundo tanto.
Boca también debió contar con un penal a favor, equilibrando los errores del juez: Zambrano fue sujetado groseramente dentro del área, pero Espinoza tampoco detectó la falta.