El capitán de la selección argentina llegó Francia y retomó los entrenamientos con el club parisino que lo recibió con honores.
Luego de pasar varios días de descanso en su Rosario natal, el astro rosarino regresó a Francia y durante la jornada de este miércoles se sumó a la práctica del PSG. Messi llegó en una camioneta de color gris y, por las bajas temperaturas que hay en París, apareció con una campera de color negro. Ni bien bajó del vehículo, varios empleados del club lo estaban esperando y él los saludó uno por uno.
Además del video que difundió el conjunto parisino, también hizo lo propio con algunas postales dentro del vestuario. Así, dentro de la intimidad del equipo que dirige Christopher Galtier, el número 10 de la Albiceleste se abrazó de manera afectuosa con Neymar, uno de los amigos que tiene en el plantel. Lo mismo hizo con el español Carlos Soler y varios más.
El experimentado jugador hizo algunos ejercicios físicos en el gimnasio y, una vez que salió al campo de juego de Camp des Loges, fue recibido por todo el plantel. Los jugadores y todo el staff le hicieron el clásico “pasillo de honor” con aplausos al campeón del mundo. Al llegar al final, lo estaba esperando el director deportivo Luis Campos, quien le entregó una estatuilla por el título en el Mundial.
Es importante recordar que, a diferencia de Leo que tuvo vacaciones desde que regresó a la Argentina tras la histórica consagración en la Copa del Mundo, otros dos jugadores que también llegaron a instancias finales en el torneo que se desarrolló en Medio Oriente fueron licenciados por los próximos días para descansar tras su participación con sus selecciones.
El elegido mejor jugador del Mundial no pudo reencontrarse con el francés Kylian Mabppé después de ser rivales en la final de la Copa del Mundo. Lo mismo sucedió con el marroquí Achraf Hakimi. A los dos la institución les dio unos días de descanso y se mostraron juntos viendo un partido de NBA entre Brooklyn Nets y San Antonio Spurs en Brooklyn.