El abogado de la familia de Liliana Ledesma, David Leiva, consideró probado la vinculación de los hermanos Delfín Reynaldo Castedo y Raúl Amadeo “Hula” Castedo con el crimen de la productora rural en 2006.
Después de 17 años del hecho, se realiza el juicio contra los hermanos Castedo por el brutal asesinato de Liliana Ledesma ocurrido en Salvador Mazza. Los hermanos Castedo están imputados por los delitos de homicidio calificado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas y encubrimiento.
Este miércoles, por zoom, Delfín Reynaldo Castedo y Raúl Amadeo “Hula” Castedo pidieron declarar desde la cárcel de máxima seguridad en Ezeiza, donde se encuentran alojados a disposición conjunta del Juzgado Federal de Orán y la justicia provincial, condenados por narcotráfico y lavado de activos.
«Rompieron el silencio, contaron su versión y terminaron autoincriminándose», afirmó el abogado de la familia Ledesma, David Leiva, y adelantó que pedirá que sean condenados como coautores del crimen de la productora porque quedó probado su grado de participación.
“Lo que hizo Delfín Castedo es reconocer que el día del crimen de Liliana recibe una llamada de Juna Moreno, el que manejaba la ambulancia y que se comunicaba con él desde Buenos Aires para informarle que Liliana Ledesma estaba muerta”, recordó. Seguidamente, agregó, que hay dos llamadas ese día y en la madrugada del día posterior se registró una llamada de Raúl “Hula” Castedo a Moreno en donde hablaban de la muerte de la productora rural.
“La audiencia fue perjudicial para Castedo”, manifestó Leiva. Según la declaración de Delfín, se presentó como un locador de servicios del exdiputado provincial, José Ernesto Aparicio (fallecido en 2013, sin ser investigado a pesar de los indicios en su contra).
Luego de eso no quiso contestar las preguntas de la querella, por lo que Leiva contó que solicitó que se introduzca como prueba la declaración que Delfín hizo en el Juzgado de Instrucción de Tartagal de Nelson Aramayo, oportunidad en donde dijo que él le desmontaba la finca a Aparicio por un usufructo de 15 años que lo colocaba como dueño, la misma que Liliana Ledesma decía que se usaba para cocinar droga y contrabandear estupefacientes y cereales.
“Terminó reconociendo la utilización de la finca para estas cuestiones ilegales y que él era el administrador y que desde su teléfono aparece conectado el “Hula” al de Aparicio y a su vez con el de los otros condenados”, indicó el abogado.
Respecto de la declaración de Raúl Castedo, Leiva recordó que también decidió declarar pero se negó a responder preguntas ni de la fiscalía ni de la querella. Su declaración fue breve y se presentó como un peón, un encargado más de la finca en cuestión.
Leiva advirtió que en su exposición, Raúl Castedo contó que contrataba al personal, estaban haciendo una locación de servicios con Delfín. “Era la persona responsable ante Delfín Castedo y Aparicio del manejo de la finca”, concluyó.
Luego de la audiencia se decidió un cuarto intermedio para la tarde de este jueves.