El conjunto catalán quedó al borde de la eliminación tras caer por 4 a 1 ante el PSG en el Camp Nou por los octavos de final de la Champions League.
Con un Mbappé imparable, el PSG goleó al Barcelona por la ida de los octavos de final de la Champions League, dejando al conjunto de Lionel Messi prácticamente eliminado.
En un primer tiempo electrizante, fue Lionel Messi quien puso arriba al dueño de casa a través de una pena máxima ejecutada de manera formidable. A pesar de que en un principio parecía no haber infracción de Kurzawa a De Jong, una repetición mostró que existió un imperceptible toque que desestabilizó al holandés dentro del área.
Previo a esto, los parisinos habían avisado con algunos desmarques de Mbappé, un remate desviado de Gueye y un increíble mano a mano dilapidado por Mauro Icardi, quien le entró mordido y no pudo sentenciar la valla de Ter Stegen (salvó Pedri en la línea). Tras el 1-0, el Barça pudo haber aumentado con un remate de Dembélé tras asistencia de Messi, pero el francés pateó débil y a las manos de Keylor Navas.
En el complemento no hubo ningún tipo de equivalencias. Si los franceses habían dejado entrever que estaban mejor parados en cancha que los españoles, lo confirmaron por completo en la parte final. De entrada nomás avisó Mbappé con un remate con rosca que salió cerca del segundo poste. Y más tarde fue Kean el que hizo revolcar nuevamente a Ter Stegen con un remate que se desvió en el camino. El Barcelona apenas generó peligro con un tiro libre de Messi que no pasó a mayores (dio en la barrera y se fue al córner) y un tiro de esquina pasado que casi conecta Griezmann por el segundo poste.
Al minuto 64 se produjo el quiebre: Leandro Paredes (uno de los mejores de la cancha) lanzó para Florenzi, que se metió en el área y envió el pase atrás, Piqué llegó a sacar el balón de la boca del arco pero Mbappé capturó el rebote y sentenció. Con más espacios por tener que ir a buscar el empate, Mbappé se armó un festín de contraataque. Enseguida el rayo número 7 se sacó a dos marcadores de encima y sacó un zurdazo rechazado por Ter Stegen.
Lo cierto es que para la revancha este Barcelona al que no le sobran ideas está obligado a convertir cuatro goles para tener chances de mantenerse vivo en la competición. Mientras tanto en Francia el rumor de que Messi se irá después de junio al PSG se agiganta día a día.