Según la Encuesta de Indicadores Laborales, el empleo registrado cayó 0,3% en comparación con enero, que alcanzó el 0,9% si se analiza el período entre noviembre del 2023 y el segundo mes del año.
Esto tuvo lugar en simultáneo con una profunda depreciación del poder adquisitivo de los salarios, del orden del 24%, según la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE), con la baja cuatrimestral más abismal de la historia del índice, superando incluso a la marca registrada durante la crisis del 2001.
La disminución del empleo registrado en el sector privado afecta a empresas de todos los tamaños, con reducciones que oscilan entre el 0,2% y el 0,4%. Las compañías más impactadas son las que cuentan con entre 50 y 199 empleados, lo que corresponde a las PyMEs, con una caída del 0,4% en el número de trabajadores.
Pese a los malos indicadores, la tasa de despidos, que se calcula considerando «los despidos sin causas, la finalización de período de prueba y la finalización de obra (en el caso de la Construcción)», según describió el escrito, es la menor de los últimos tres meses: 0,5%.
«Este comportamiento resulta habitual en contextos de caída de la actividad económica. El nivel de empleo se ajusta principalmente a partir de la reducción de las incorporaciones de personal y no tanto por el aumento de las desvinculaciones, ya sean decididas por las personas o por las empresas», argumentó el documento.
Construcción, el sector más afectado por la caída del empleo formal
Respecto a los sectores más afectados, se observa una contracción del nivel de empleo en todos los sectores de actividad con distintos niveles de intensidad.
Comercio, restaurantes y hoteles registró una caída de 0,1%, la industria manufacturera y los servicios comunales, sociales y personales presentaron, ambas, una reducción de 0,2%, y transporte, almacenamiento y comunicaciones, al igual que servicios financieros a las empresas, mostraron bajas del 0,3%.
Sin embargo, fue el sector de la construcción el que sufrió el mayor declive, con una profunda baja del 1,3%. De esta manera, el sector mantiene la tendencia negativa que se viene vislumbrando desde agosto de 2023 y acumula una reducción anual del 11,2%.
En cuanto a la región con mayor caída del empleo, en el aglomerado de Gran Buenos Aires se observa una mayor reducción de los puestos de trabajo (del 0,4%), mientras que en el conjunto de los aglomerados del interior del país la caída fue moderada (del 0,1%).