Con esta decisión, podrán permanecer abiertas en caso de confinamiento entre las 6 y las 18 horas.
Mientras las ciudades de Niza (sureste) y Dunkerque (norte) se disponen a pasar un primer fin de semana confinadas por el deterioro de la situación epidemiológica, las librerías podrán abrir entre la 6 y las 18 horas, se precisó en el decreto consignado por la agencia AFP.
Durante el confinamiento nacional en noviembre, los libreros podían vender únicamente las obras que los clientes habían reservado a distancia y que se acercaban a buscar a la puerta de los negocios.
Pero estos locales no podían recibir clientes en su interior, ya que las librerías no estaban consideradas como esenciales.
La ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, se felicitó por la decisión del gobierno y defendió en declaraciones a la AFP que «las librerías son comercios esenciales, algo que nunca se cuestionó».