Después de la media sanción de la Cámara de Diputados, el Senado también trató sobre tablas el proyecto que regula las protestas y el oficialismo se impuso por un solo voto.
Con una legislatura vallada y rodeada de policías desde la madrugada, y con numerosos docentes, trabajadores de la salud y organizaciones sociales rechazando la iniciativa, el Senado de la Provincia sancionó de manera definitiva la «ley antipiquetes».
La norma que prevé, entre otras cosas, que las manifestaciones deberán notificarse con una anticipación de 24 horas a la comisaría más cercana, se deberá indicar el lugar donde se realizara, el tiempo mediante el cual será la protesta y quiénes serán los responsables de la misma.
También prohibe los cortes totales del tránsito, ya sea en calles urbanas o rutas, y una mediación que se extenderá hasta por dos horas, caso contrario se notificará a la justicia para que actué.
A diferencia de lo que ocurrió en la sesión de Diputados, no hubo abstenciones y sí votos rechazando la norma fundamentados en que es «anticonstitucional», que vulnera la libre expresión y que «es un avasallamiento crítico de los derechos fundamentales» votaron en contra Carlos Ampuero de Santa Victoria, Héctor Calabró de La Caldera, Héctor D´Auria de Metanol, Manuel Pailler de San Martín, Carlos Roso de Güemes, Sonia Magno de San Carlos, Sergio Saldaño de Cafayate, Leopoldo Salva de Los Andes y Walter Wayar de Cachi.
En tanto, a favor votaron Diego Cari de Guachipas, Juan Cruz Curá de Orán, Esteban D´Andrea de Chicoana, Emiliano Durand de Capital, Marcelo Durval García de Anta, MAshur Lacad de Rivadavia, Javier Mónico de Rosario de la Frontera, Sergio Ramos de Rosario de Lerma, Alfredo Sanguino de La Candelaria, Carlos Sanz de de Cerrillos y Jorge Siro de La Viña.