«Vimos cosas obscenas», afirmó el Presidente de la Nación en referencia al pedido hecho junto a gobernadores para que se investigue al presidente de la Corte Suprema de Justicia.
El presidente Alberto Fernández anunció este domingo que impulsará junto a los gobernadores un juicio político al titular de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, «para que se investigue su conducta en el desempeño de sus funciones», debido al dictado de una cautelar a favor de la Ciudad de Buenos Aires sobre fondos para ese distrito.
El mandatario agregó en una carta que difundió la Casa Rosada que «también requeriremos que se investiguen las conductas de los restantes miembros del máximo tribunal».
El conflicto está planteado por el fallo en el que la Corte Suprema de Justicia dispuso que el Gobierno nacional le pague a la ciudad de Buenos Aires el 2.95% de la masa de impuestos coparticipables, dando lugar al reclamo que había iniciado la administración que conduce Horacio Rodríguez Larreta.
En su carta, Fernández aseveró que «al asumir mi mandato juré observar y hacer observar la Constitucional en cuanto de mi dependiere».
Estamos iniciando un nuevo año. Dejamos atrás otro que nos deparó alegrías pero que también nos impuso las exigencias propias de una pandemia que no termina y una guerra que nos condiciona poniendo en crisis el desarrollo que tanto necesitamos. pic.twitter.com/rsHKFc2BvI
— Alberto Fernández (@alferdez) January 1, 2023
De esa manera, afirmó: «Debo impedir que se siga manipulando el Consejo de la Magistratura con insólitas interpretaciones jurisprudenciales que permiten al Poder Judicial entrometerse en las decisiones del Congreso Nacional».
Y sostuvo que es su deber «promover acciones cuando el sistema federal es puesto en crisis a través de una innecesaria medida cautelar y del indebido planteo de una ciudad autonómica».
Además, Fernández afirmó que en los últimos meses se ha visto «un avance inadmisible del Poder Judicial de la Nación sobre los otros poderes de la Argentina» y aseguró «diversas publicaciones jamás contradichas, han dejado al descubierto lo que desde hace mucho tiempo vengo advirtiendo: el vínculo escandaloso entre parte de la política y la Justicia».
«Los diálogos entre funcionarios judiciales y políticos de la oposición en los que se anticipan decisiones y recomiendan fundamentos políticos para ser usados a la hora de decidir judicialmente casos con trascendencia institucional indudable, han quedado impúdicamente expuestos ante el asombro generalizado».
Luego, en una entrevista concedida a C5N en Brasil, Fernández expresó su «preocupación por lo que ha pasado en los últimos meses, ya que hubo un permanente avance de la Corte Suprema sobre los otros poderes de la República Argentina y la república exige tres poderes independientes».
«Lo que hizo la Corte con el tema coparticipación de la ciudad de Buenos Aires se convierte en un hecho de intromisión» de la justicia en los otros poderes, consideró.
Y apuntó a Rosatti: «En particular su presidente, que tiene la particularidad de ser presidente del Consejo de la Magistratura, consecuencia de que declaró la inconstitucionalidad de una ley con más de 16 años de vigencia que había sido aprobada por el Congreso».
Fernández añadió que «uno ha visto cosas muy obscenas a la vista de la ciudadanía y en un Estado de Derecho; lo que vimos en Lago Escondido fue terrible. Nadie dijo ‘no viajamos, no me pagaron el viaje'», en alusión al viaje de jueces, fiscales, funcionarios porteños y empresarios de medios de comunicación a esa zona patagónica.