Vacaciones y tiempo libre implican para muchos niños y niñas la posibilidad de estar más horas en internet. La Asesora de Incapaces 4, Noelia Pérez, recordó que es responsabilidad de los padres protegerlos de los riesgos en línea pero que impedirles el acceso a la tecnología no es la solución. En tanto, el ingeniero Martín de Bustos, responsable del área de Informática del Ministerio Público Pupilar, habló de las aplicaciones que pueden servir para supervisar la actividad de los chicos en la web.
“El acceso a la tecnología es un derecho de todos los niños, niñas y adolescentes. Internet no es bueno ni malo: eso depende del uso que le demos. Puede ser muy positivo como también muy negativo. Los adultos tenemos que ejercer el control y conversar con los chicos sobre los peligros con los que pueden encontrarse”, explicó Noelia Pérez.
La magistrada dijo que, ante el riesgo, muchos adultos optan por prohibirles a sus hijos el uso de celulares pero consideró que no es la opción más adecuada porque los niños necesitan acceder a las nuevas tecnologías, por ejemplo, con fines educativos.
Martín de Bustos, por su parte, explicó que los teléfonos permiten configurar aplicaciones para controlar cómo se los usa antes de entregárselos a los niños o niñas. Señaló que hay un amplio abanico de opciones y que una de las más usadas es “Google Family”, que se debe bajar en el celular del niño y del adulto responsable.
“Hay una manera de vincular los dos teléfonos para que el padre tenga acceso al del hijo y establezca lo qué quiere permitir que use, por ejemplo: si van a poder utilizar aplicaciones o navegar en internet o gastar con alguna tarjeta asociada. También se puede poner un límite al tiempo de pantalla por día”, indicó.
El ingeniero señaló que muchas de estas herramientas son gratuitas y que otras tienen un costo, de acuerdo al uso que se les quiera dar. “Lo bueno es saber que están al acceso de todos los padres y madres con el solo hecho de tener un celular”, sostuvo. En las “tiendas” de los equipos se pueden encontrar estas aplicaciones y también informarse sobre la experiencia de otros usuarios para ver si son confiables.
De Bustos sostuvo que, de todas maneras, el hecho de tener alguna de estas aplicaciones no debe liberar a los adultos de la responsabilidad de supervisar personalmente cómo están usando los chicos internet, sobre todo cuando son más pequeños y vulnerables. “Las tecnologías nos dan un montón de posibilidades pero también pueden fallar. Como padres, siempre tenemos que estar presentes y dialogar con nuestros hijos”, afirmó.
El profesional también pidió tener en cuenta que, desde perfiles falsos, se puede contactar a los niños en plataformas de juego y en programas que se usan en equipos como televisores inteligentes, para generar un vínculo y luego obtener material destinado redes de pedofilia y abuso sexual infantil.
“Los niños tienen derecho a acceder al entorno digital. Incluso hay una observación general del Comité de los Derechos del Niño, la número 25, que hizo un análisis exhaustivo sobre el tema. Los Estados, parte que suscribieron la Convención sobre los Derechos del Niño deben garantizar el acceso, con el debido cuidado y control por parte, en primer lugar, de los padres”, agregó Noelia Pérez.
Describió que esa supervisión se debe adecuar a las edades y a la capacidad progresiva, porque no es igual el discernimiento sobre los posibles riesgos que tiene un niño de 6 años que un adolescente de 17.
“Lo mejor que se puede hacer es hablar claramente sobre los riesgos, los perfiles falsos y los abusos que pueden surgir en las redes para que no interactúen con desconocidos”.
Pérez señaló que la curiosidad de un niño puede llevarlo, por ejemplo, a tratar de averiguar en internet qué significa “sexo” y que eso lleva a que los buscadores generen derivaciones a publicaciones y contactos que no son adecuados para menores de 18 años.
Finalmente, la asesora agregó que establecer un límite de tiempo para usar dispositivos es fundamental. “Psicólogos y médicos nos informan sobre algunas consecuencias del uso ilimitado de celulares. Se pueden dar, por ejemplo, problemas posturales, y de desarrollo”, comentó.
Ambos profesionales, que trabajan bajo la coordinación de la Asesora General de Incapaces Mirta Lapad, enfatizaron en la importancia del diálogo constante entre padres e hijos.