Jueces piden compensación por trabajar durante la feria extraordinaria

Tres jueces elevaron una nota al presidente de la Corte de Justicia pidiendo que se contemple el pago de una compensación por trabajar durante la feria extraordinaria dispuesta hasta el 11 de septiembre.

Se trata de los jueces Marcelo Domínguez, María Ines Casey y María Domínguez, jueces de la Sala III de la Cámara de Apelaciones Civil y Comercial, quienes solicitaron a Guillermo Catalano, presidente de la Corte de Justicia de Salta, que “arbitre las medidas necesaria tendientes al reconocimiento del pago o compensación con días de licencia a utilizar por los Magistrados, Magistradas, funcionaria y agentes que presten servicios en este Tribunal durante la feria extraordinaria establecida mediante la Acordada Nº13.175”.

Dicha acordada establece una feria judicial extraordinaria desde el 28 de agosto y hasta el 11 de septiembre inclusive, y habilita además a que los abogados del fuero local pueden solicitar “electrónicamente” la habilitación de la feria de los expedientes que tengan que ver con medidas cautelares, denuncias por comisiones de delitos, concursos civiles y comerciales y acciones de amparo, entre otros.

La acordada también contempla que se puede pedir la habilitación de feria en los siguientes casos: pago de créditos alimentarios en procesos de familia; pago de créditos laborales; pago de indemnizaciones por daños y perjuicios; pago de honorarios profesionales de letrados y otros casos que se consideren urgentes y el pedido esté debidamente fundamentado.
En su pedido dinerario para hacer su trabajo estos tres jueces se fundamentan en la feria implica un incremento del trabajo normal, pero “la gravedad de la situación epidemiológica actual por la circulación viral comunitaria por coronavirus en esta capital, compromete el normal desarrollo de las tareas jurisdiccionales propias de este Tribunal en cualquier feria”.
Pero además agregan que sus tareas habituales ya se encuentran menoscabadas “con motivo de la disminución de personal y funcionarios de esta dependencia”.

Estos jueces ávidos por incrementar sus ya abultadas remuneraciones obviaron mencionar en su pedido que a razón de la feria sólo algunos juzgados trabajan de forma presencial, pero lo más importante es que al suspenderse los plazos procesales y únicamente se dan trámites a los juicios urgentes, el trabajo disminuye notablemente, tanto que muchos empleados, sea de forma presencial o remota, aprovechan para ponerse al día con cosas atrasadas, sin tanto apuro.

En realidad lo que ocurre no difiere de lo que pasa en temporadas normales, o sin pandemia, en las ferias habituales de enero (todo el mes) y julio (15 días de vacaciones de invierno), cuando en feria se trabaja en cosas urgentes y el resto espera, pero a nadie se le ocurre pedir una compensación monetaria por trabajar en durante alguna feria, independientemente de si hay circulación comunitaria de COVID-19 o no.

En resumen lo que pretenden estos tres jueces es que se les pague un suplemento por trabajar en esta feria extraordinaria, como si fuera trabajo desarrollado durante sus vacaciones ordinarias, o que por este tiempo de trabajo “arduo” y de circulación comunitaria, se les den vacaciones compensatorias.

No nos olvidemos que ya tienen un mes y medio de vacaciones por año, durante las ferias normales de enero y julio, y que tienen sueldos superiores a los 350.000 mil pesos mensuales, además de otros beneficios como no pagar impuesto a las ganancias y que sus declaraciones juradas no sean públicas. Pretenden cobrar más por hacer su trabajo, como todos los que tienen uno y no lo perdieron tras esta crisis, además por hacerlo en horario reducido y con menos carga laboral.

Copia de la nota enviada a Catalano