La decisión de Arabia Saudita de reabrir su espacio aéreo y fronteras con Qatar fue el primer paso importante para poner fin a la crisis que comenzó en 2017.
Líderes de los cuatro países del golfo Pérsico (Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Bahréin) que boicoteaban a Qatar firmaron una declaración de amistad y restablecieron las relaciones diplomáticas con ese país para poner fin a una disputa de hacía más de tres años, horas después de que Arabia Saudita levantara un embargo por ese período contra el pequeño emirato.
«Hoy se decidió (…) pasar página y restablecer todas las relaciones diplomáticas» con Catar, declaró a la prensa el príncipe y ministro de Relaciones Exteriores saudita Faysal bin Farhan Al Saud, citado por la agencia de noticias AFP.
La decisión de Arabia Saudita de reabrir su espacio aéreo y fronteras con Qatar fue el primer paso importante para poner fin a la crisis que comenzó en 2017, justo cuando el Gobierno estadounidense de Donald Trump aumentaba su presión sobre Irán.
Riad anunció la medida el lunes por la noche, justo antes de la reunión de los líderes del Golfo en la antigua ciudad desértica saudita de Al-Ula en el marco una la cumbre regional.
El avance sigue a un impulso final de la saliente administración Trump y de Kuwait por mediar en el conflicto y cuando Arabia Saudita busca unificar las filas árabes antes de la llegada a la Casa Blanca del demócrata Joe Biden.
A Arabia Saudita le preocupa que Biden pueda reducir la presencia militar estadounidense en el Golfo Pérsico, que se expandió bajo el mandato Trump- y que vuelva a entablar negociaciones nucleares con Irán, según la directora ejecutiva del Foro Internacional del Golfo, Dania Thafer.
“Si ese es el caso, entonces los estados (árabes) deben responder con una solución regional a la seguridad. Y creo que resolver la crisis del Golfo es un paso adelante en esa dirección”, expresó Thafer citada por la cadena de noticias CNN.
El príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, que se abrazó con el emir de Qatar a su llegada a la cumbre, dijo que la región necesita unirse y enfrentar los desafíos planteados por Irán y sus programas nucleares.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, felicitó a Qatar por la firma del acuerdo con los países del Golfo, y reiteró que Teherán no es un «enemigo» ni una «amenaza» en la región.
El titular de Exteriores de Irán, país que mantiene una relación tensa con los países del Golfo, acompañó su mensaje con la etiqueta «esperanza».
Los cuatro países que boicotearon conjuntamente a Qatar (Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Bahréin) esperaban que su embargo y el bombardeo mediático lo presionarían para poner fin a sus estrechas relaciones con Turquía e Irán.
Estos países conocidos como Cuarteto acusaban a Qatar de «apoyar el terrorismo» -acusaciones rechazadas en todo momento desde Doha.