El Gobierno decidió otorgar más subsidios a los colectivos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) por $ 20.000 millones al mes para evitar otro aumento de tarifas.
Así, crecerá la suma de las transferencias de la Nación, la Ciudad y la provincia de Buenos Aires para las empresas de unos $ 160.000 millones mensuales a aproximadamente $ 180.000 millones, de acuerdo a lo que cuentan fuentes privadas del sector. De ese total, un 40% lo aporta Nación, un 10% la Ciudad y un 50% la provincia.
Como aún así no se terminan de cubrir los costos reales de operación, está en marcha un ajuste progresivo en la estructura del transporte público que ya se manifiesta con una reducción en las frecuencias y un recorte del personal, que tiene en alerta al sindicato, la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
Una de las simulaciones, que estuvo a punto de avanzar a mediados de este mes pero finalmente quedó sepultada fue llevar el mínimo a $ 370, un incremento de 37%.
Formalmente, la Nación podría avanzar sin audiencia pública con una actualización de hasta el 79,8% -la inflación acumulada en el primer semestre de 2024-, lo que llevaría el boleto mínimo hasta un tope de $ 485,46.
Para el interior del país
Mientras tanto, la administración de Javier Milei mantiene la eliminación del Fondo Fiduciario para el Transporte Público de Pasajeros de todo el interior del país.
Los subsidios sólo se mantienen para Buenos Aires, y según dijo el jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos, durante el tratamiento de la Ley Bases «no se retomará ningún subsidio para las provincias».
El impacto en la inflación
Pero con equilibrio en las cuentas públicas, la prioridad número uno del ministro de Economía, Luis Caputo, es que la inflación mensual continúe bajando hasta 0% a fin de año o incluso se convierta en deflación -baja generalizada de los precios-.
Según una proyección que había hecho la consultora EcoGo a mediados de mayo, solamente un alza de 51,6% podría derivar en que la inflación trepe 1,16 puntos porcentuales.
De acuerdo a los datos de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) -en la que está representada el grupo Metropol, el segundo más grande y solo por detrás de DOTA-, el Gobierno reconoció entre tarifas y subsidios un total de $ 863 por pasajero en junio.
Mientras tanto, el costo «real» -que contabilizaría correctamente los precios del gasoil, insumos y otras variables- fue el mes pasado de $ 1.192 sin el Impuesto al Valor Agregado (IVA) o $ 1.317 con el IVA de 10,5% incluido.
Es decir, Transporte reconoce $ 205.569,35 millones por mes sobre un costo real de $ 259.936,44 millones, por lo que hay una «pérdida para la calidad del servicio, frecuencias, seguridad y renovación de unidades» equivalente a $ 54.367,09 millones mensuales.