Militantes y dirigentes del justicialismo salteño realizaron una manifestación simbólica en la sede partidaria para rechazar la intervención nacional y pedir la normalización.
Un grupo de afiliados del Partido Justicialista de Salta se congregó este domingo por la tarde en la histórica sede de calle Zuviría al 900, con el objetivo de visibilizar su rechazo a la intervención que mantiene al partido bajo control de la conducción nacional. La protesta, de carácter simbólico, busca expresar el reclamo por la restitución de la autonomía institucional y la convocatoria a elecciones internas.
Según denunciaron vecinos, hubo forcejos, golpes y hasta disparos al aire, por lo que intervino la policía y generó un momento tenso que no pasó a mayores por la intervención de dirigentes allegados a la dirigencia desplazada, como así también a la comisión interventora.
La semana pasada, en la sesión ordinaria de la Cámara de Diputados, legisladores como Luis Mendaña, representante de La Caldera, expresaron su malestar ante la situación y plantearon la posibilidad de «tomar» el partido.
Con la protesta, los militantes exigen la restitución de la autonomía institucional y la convocatoria urgente a elecciones internas para devolverle legitimidad a las autoridades locales del PJ. Todo ello se suma a los magros resultados del espacio en las elecciones del pasado domingo.
Las expectativas están puestas en este martes cuando se desarrolle el Congreso Nacional del PJ, que se realizará por Zoom, y en ese ámbito los congresales salteños presentarán su postura formal. “Nuestros 33 congresales nacionales, que son miembros del Congreso, van a presentar misiones, acompañados por La Rioja, parte de Jujuy, parte de Tucumán, parte de Catamarca y compañeros de distintas provincias”, detallaron desde la conducción local.
La expectativa está puesta en que esta presentación colectiva logre destrabar el proceso y abra el camino hacia una normalización del partido en Salta. El reclamo, sostienen los referentes provinciales, no es aislado, sino parte de una demanda más amplia por mayor federalismo y participación interna dentro del peronismo.