La gestión anterior dejó cheques sin fondos por casi $80 millones que «dejaron a la actual gestión atada de pies y manos porque dependemos sólo de la coparticipación y no hay margen para maniobrar».
Después del cambio de gobierno del 10 de diciembre, la Municipalidad de Tartagal publicó una solicitada para convocar a todo aquel que recibió un cheque sin fondo por parte de la gestión del exintendente Mario Mimessi, y aunque se presentaron decenas, a la fecha siguen apareciendo firmas y personas afectadas.
«El primer registro fue una deuda de aproximadamente de $40 millones pero siguen apareciendo cheques sin fondos y el monto se acerca a los $80 millones», precisó el secretario de Gobierno de la Municipalidad de Tartagal, Ernesto Restom.
“Hay un proceso irregular de mala administración por lo que podemos determinar durante el período anterior, antes del 10 de diciembre, que las cuentas evidentemente no fueron bien manejadas”, señaló el funcionario y detalló que la Municipalidad fue sancionada por el Banco Central de la República Argentina, «por lo que no podemos apelar al giro de descubiertos que era una herramienta para pagar sueldos, entre otras cosas».
«Después de la gestión del exintendente, la Municipalidad está atada de manos y pies”, dijo Restom y señaló que «Tartagal depende muchísimo de la coparticipación porque, sin descubiertos bancarios, el margen de maniobras para hacer uso de herramientas financieras quedó recortado».
El funcionario también precisó que Mario Mimessi avaló el ingreso trabajadores de manera irregular porque restaban seis meses para culminar su mandato y señaló que esa medida “hoy pone a la Municipalidad en un punto bastante complicado”.