Aunque Pablo López presentó la renuncia, el Concejo debe tratarla en sesión por lo que todavía no fue aceptada al encontrase en periodo de receso. «Hay que removerlo del cargo», dijo Farquharson.
Tras repudiar los hechos que determinaron la renuncia del edil, Gustavo Farquharson consideró que Pablo López fue denunciado por hechos graves y por inmoralidades que desprestigian al cuerpo legislativo. “Incurrió en causales que habilitan removerlo del cargo”, lo que debería impedir que pueda asumir en diciembre un nuevo mandato.
El escándalo ya tiene trascendencia nacional. Pablo Emanuel López, concejal de La Libertad Avanza en la ciudad de Salta, debió renunciar a su cargo tras la difusión de un audio en el que extorsiona a una militante de su espacio político a cambio de favores sexuales. El caso, además, fue denunciado ante la Fiscalía de Violencia Familiar y de Género que proveyó de un botón anti pánico a la denunciante; al tiempo que a las 16 horas de ayer ingresó al Concejo Deliberante la dimisión del edil.
«Es muy grave. Estamos hablando de una denuncia que incluye violencia laboral, política, física, sexual, psicológica y económica en donde el presunto agresor ocupa un cargo público. Soy el presidente de la Comisión de Derechos Humanos, Mujeres, Géneros y Diversidad del Concejo Deliberante, con mis pares remarcamos siempre la necesidad de construir una sociedad que respete los derechos de las mujeres y promueva la igualdad. Lo ocurrido ahora va a contramano de todo eso. Ya sabíamos, con pesar, muchos rostros que a mi juicio eran negativos del concejal en términos políticos; pero la violencia de género ejercida como muestra la denuncia, era la cara que faltaba ver», expresó.
Farquharson adelantó que desde el Concejo Deliberante se garantizará la transparencia en el proceso de Juicio Político en el caso que se lleve a cabo, para lo cual se solicitará a la Justicia que remita información de la causa. Y puesto a opinar sobre la dimisión del concejal López, declaró que su posición es otra. “Creo que el cuerpo no debe aceptarle la renuncia. Mi postura es que corresponde un juicio político. Un mecanismo que contempla la Constitución Nacional en su artículo 53, también la Carta Municipal de la ciudad de Salta y el reglamento interno del Concejo Deliberante. Acá hay arbitrariedad en el ejercicio de las funciones del concejal, la ejerció contra una trabajadora del Concejo y hay elementos que dan cuenta de una inmoralidad que desprestigian al cargo que ostenta. Es curioso. Personas que aseguran transparentar a la política, terminan desprestigiandola. No creo que debamos aceptarle la renuncia. Creo que el cuerpo debe activar los mecanismos previstos para iniciar un Juicio Político y luego remover al concejal que incurrió en las causales previstas”, manifestó.
En ese punto, Farquharson recordó que “si bien él presentó la renuncia, podría asumir nuevamente en diciembre. Con mucha razón la mayoría de mis pares quiere evitar que eso suceda. Por eso creo que el juicio político no sólo corresponde, sino que también es la herramienta para que quienes ejerzan este tipo de violencias, tengan una pena política acorde al daño que generan hasta que la Justicia determine penalidades propias de su ámbito. No debemos dejar lugar a duda de que acá nadie tiene privilegios».
Finalmente, el concejal manifestó que resulta prioritario que el Concejo Deliberante también colabore para garantizar la protección de la víctima. «Es prioritario protegerla, que sepa que el cuerpo trabaja para garantizarle seguridad, asistencia y que la Justicia avance con celeridad.”