El joven tiene numerosos antecedentes por violencia de género. Además, protagonizó incidentes con una facción de la barra de Juventud Antoniana.
Matías «semilla» Paz permanece prófugo de la justicia desde el lunes, cuando a pedido del Fiscal Penal, Ramiro Ramos Ossorio, el Juzgado de Garantías ordenó su detención por haber realizado tres detonaciones con armas de fuego en un bar del Paseo Güemes.
Las imágenes viralizadas fueron elocuentes. Primero protagonizó un incidente en un bar que sólo quedó en discusión, en otro volvió a trenzarse con empleados pero a éste último volvió con un arma de fuego en su poder. Hizo tres detonaciones a metros de tres trabajadores y no mató a nadie de casualidad.
Según los testigos, primero se movilizaba en una motocicleta, acompañado de una joven, y al regresar lo hizo a bordo de un VW Bora. Ingresó a la Avenida Belgrano en contra mano, disparó en Temple, decenas corrieron y gritaron, mientras él se fue en sentido contrario y sin que ningún policía se interponga en su paso.
Recién el lunes, cuando los imágenes alcanzaron las redes sociales, se ordenó la detención de Matías «semilla» Paz y su acompañante. Cuando la policía llegó a los domicilios, lograron la aprehensión de ella pero él ya se había fugado.
Fuentes vinculadas a la investigación, detallaron que la joven no guarda relación con los hechos y que, incluso, fue quien logró llevárselo de la zona tras el primer altercado. Además, corroboraron que ella misma lo denunció por violencia de género, por lo que fue liberada aunque quedó vinculada a la causa.
Ese no es el único antecedente que pesa sobre los hombros del sujeto, además tiene otras denuncias por hechos violentos contra ocasionales parejas. También se confirmó que protagonizó incidentes que fueron expuestos en redes sociales pero que no se tradujeron en denuncias formales.
«Semilla» también fue investigado por reiterados hechos violentos protagonizados por una de las facciones de la barrabrava de Juventud Antonina, aunque ninguna de ellas superó la etapa inicial. Incluso, fue relacionado -aunque luego no logró sustentarse – al ataque a balazos que sufrió el presidente de ese club, Javier Russo, a principios de año.
Hijo del propietario de un conocido hotel alojamiento del barrio Hernando de Lerma y con domicilio en la zona este de la ciudad, logra permanecer prófugo de una fuerza que asegura buscarlo intensamente.
Más policías en el Paseo Güemes
La Policía, por su parte, incrementó la seguridad en el Paseo Güemes, entre otras medidas, frente al recelo y temor que sienten las personas que viven y/o trabajan en la zona.
El ministro de Seguridad y Justicia de Salta, Marcelo Domínguez, junto al jefe de Policía, Miguel Ceballos, y el subjefe de la fuerza, Pablo Vilte, se reunieron con miembros de la Cámara Hotelera y Gastronómica de Salta para dialogar sobre el servicio de seguridad en la zona donde se registró el incidente.
Durante el encuentro abordaron diversos temas relacionados con el servicio policial y las problemáticas existentes en la jurisdicción.
El ministro atendió las inquietudes y preocupación de los empresarios por el violento episodio y anunció que se dispuso un operativo preventivo específico en la zona, con más patrullas peatonales, además del refuerzo de los recursos operativos y logísticos.
El objetivo fue potenciar la cobertura policial en el lugar, para que la actividad gastronómica y comercial se desarrolle con tranquilidad para los trabajadores, los clientes y la comunidad en general, detallaron voceros gubernamentales.