El regreso a la Fase de Aislamiento en la capital formoseña desencadenó una protesta de vecinos y comerciantes, que finalizó con un enfrentamiento con la Policía local, que reprimió con severidad. Incluso desde el Gobierno nacional, alineado con Insfrán, cuestionaron la represión aunque con un particular argumento.
Comerciantes y vecinos de la capital de Formosa iniciaron el viernes una protesta frente a la Casa de Gobierno de esta provincia en protesta por el decreto del jueves último que por 15 días obliga a regresar a la etapa de Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio. Esta medida del Gobierno provincial se produjo luego de 47 casos de coronavirus en tres días.
Recordemos que durante el año pasado, Formosa tuvo uno de los cierres más duros de la actividad económica y de fronteras con el resto del país. Los números sanitarios avalan esta medida, pero indudablemente a un altísimo costo económico en una de las provincias más pobres de Argentina.
Tras el decreto del jueves, los comerciantes dijeron basta, abrieron sus negocios y marcharon masivamente hacia Casa de Gobierno. La represión y el enfrentamiento solo fue cuestión de tiempo.
La Policía intentó disuadir la concentración con balas de goma, gases lacrimógenos; desde el otro sector respondieron con piedras y cualquer objetivo que estuvo a mano. El saldo fue más de 90 detenidos y muchísimos lesionados.
El gobierno de Gildo Insfrán viene recibiendo duros cuestionamientos por sus actuaciones y por las restricciones a los derechos individuales. La oposición de todo el país salió a apuntar los cañones hacia el mandatario vinculándolo a un gobierno de dictadura y represión. Por su parte desde Formosa se defienden argumentando su situación sanitaria en comparación a otras provincias y vinculando los hechos a grupos organizados y con fines políticos.
Fue tan violenta la situación de este viernes, que incluso desde el Gobierno nacional salieron a cuestionar la represión, aunque de una forma bastante particular. Lo hizo la Secretaría de Derechos Humanos en un comunicado oficial.
«La permanente campaña de desprestigio llevada adelante por los medios hegemónicos de comunicación sobre el gobierno provincial, el constante boicot a las medidas sanitarias excepcionales para hacer frente a la pandemia, el uso político que algunos sectores de la oposición hacen de estos hechos, y la violencia desmedida de algunos manifestantes -que hoy incluso intentaron ingresar a la Casa de Gobierno provincial-, no justifican el uso desproporcionado de la fuerza policial en la represión de la protesta», sostuvo el organismo nacional en un comunicado.
La secretaría que conduce Horacio Pietragalla señaló además que «las fuerzas de seguridad, tanto las nacionales como las provinciales, deben estar capacitadas para contener actos de violencia, en el contexto de protestas en un marco de pleno respeto de los derechos humanos».