El equipo de Gallardo tuvo a un Alvarez intratable, autor de los dos goles. Boca jugó con uno menos desde los 15´del primer tiempo.
River Plate fue amplio dominador de principio a fin y se quedó con la victoria por 2-1 en el Superclásico ante Boca Juniors válido por la fecha 14° del torneo de la Liga Profesional. En el día que marcó el regreso de los hinchas al estadio Monumental luego de un año y medio de ausencia por la pandemia de coronavirus, el equipo de Marcelo Gallardo dio un recital de fútbol ante un rival que estuvo muy lejos de su mejor versión y así consiguió un triunfo que le permitió subirse a la cima del certamen.
En un partido que no terminaba de armarse en el juego, las mayores incidencias del comienzo pasaron por las decisiones del árbitro. A los 4 minutos, Fernando Rapallini amonestó a Enzo Pérez por una dura falta sobre Agustín Almendra en la mitad de la cancha. Casi desde el arranque, el mediocampista central del local jugaba condicionado.
Sin embargo, la peor parte se la iba a llevar Boca, que se iba a quedar con diez hombres a los 15 minutos. Marcos Rojo vio dos tarjetas amarillas en dos minutos (la primera por una falta en la mitad de la cancha sobre Braian Romero y la segunda por una entrada contra Agustín Palavecino cerca del área) y se fue expulsado, obligando a Sebastián Battaglia a cambiar los planes. Inmediatamente, Carlos Zambrano ingresó en lugar de Edwin Cardona para reacomodar la defensa Xeneize.
Pero sobre los 25′ iba a aparecer la gran joya de River para torcer la historia. Julián Álvarez tomó la pelota por el centro del ataque, enganchó ante la marca, se hizo un espacio y sacó un tremendo remate que bajó justo para convertirse en el 1-0 del Millonario. En vano fue la volada de Agustín Rossi. Nada pudo hacer el arquero ante la genialidad del joven delantero que ha sido citado por Lionel Scaloni para disputar la triple fecha de Eliminatorias con la selección argentina.
Con la ventaja en el marcador y en cantidad de jugadores dentro del campo de juego, el Millonario mostró su mejor versión. El equipo local se hizo de la pelota y la hizo circular con la intención de generar nuevos espacios para lastimar. Boca, por el contrario, no encontraba la brújula y se veía obligado a retroceder sus líneas, dejando a casi todos sus jugadores en el terreno propio corriendo detrás de la pelota. La única chance del Xeneize fue un disparo de media distancia de Luis Advíncula que se fue apenas por arriba del travesaño.
Más allá de la apabullante superioridad, no todas eran buenas para los locales: sobre los 32′, Braian Romero debió abandonar la cancha por una molestia en uno de sus aductores y fue reemplazado por Jorge Carrascal.
La presión de River en la salida no daba tregua y a partir de ese trabajo iba a llegar la segunda conquista de la tarde. Boca se vio obligado a jugar con Agustín Rossi, quien salió corto ante la marca del recién ingresado colombiano. Milton Casco ganó en tres cuartos de cancha y cedió por la derecha para el avance de Santiago Simón, que mandó el centro por lo bajo para la entrada de Julián Álvarez. El atacante extendió su gran momento con un simple toque a la red para decretar el 2-0.
La tónica del encuentro se mantuvo hasta el cierre, ni los cambios pudieron torcer la historia. Sobre los 39′, Gallardo decidió mandar a la cancha a Luis Suárez y Leonardo Ponzio, quien se calzó la cinta de capitán. El descuento del Xeneize llegó cuando ya no quedaba tiempo para más: Carlos Zambrano conectó de cabeza y Franco Armani intentó contener, pero la pelota terminó cruzando la línea de gol.