Así lo manifestó Wilber Zamora, gerente general de Mansfield. Esta semana la minera obtuvo sus primeras barras de doré (oro-cobre) en la puna salteña.
La minera Mansfield indicó que realizó el primer fundido de oro en su planta ubicada en Salar de Arizaro en la Puna salteña, como resultado se obtuvo un lingote doré. Esto implica un gran avance en la provincia, ya que es la primera mina de oro a cielo abierto que se pone en marcha en la historia de Salta.
Wilber Zamora, gerente general de Mansfield, consideró que “las inversiones mineras son inversiones de riesgo y a muy largo plazo, como tales necesitan de reglas de juego claras y estabilidad jurídica en los lugares donde se desarrollan los proyectos.
En este sentido, Salta ha demostrado que la minería es una política de estado para las inversiones y el desarrollo de proyectos mineros”.
Además, consideró que la seguridad jurídica que brinda la provincia “en estos casos es fundamental porque hace a la elección del destino, por parte de los inversores para desarrollar estos proyectos, ya que son de largo plazo y se necesitan que se sostengan políticas de estado a lo largo”.
“Seguridad jurídica, estabilidad , infraestructura y acompañamiento estatal son los puntos que tienen en cuenta los inversores mineros al momento de elegir una jurisdicción donde instalarse y desarrollar proyectos», indicó Zamora.
A lo largo del desarrollo de Mina Lindero, que llevó casi 20 años desde su descubrimiento hasta la etapa actual, Salta ha demostrado que la minería es una política de estado, donde la seguridad jurídica y el acompañamiento de la provincia son muy importantes.”, finalizó Wilber Zamora.
Actualmente Mansfield está ajustando el sistema para entrar en producción comercial en el primer trimestre del año que viene. La minera generará más de 450 puestos directos de trabajo y otros 2250 más en forma indirecta, lo que implica un fuerte impulso al desarrollo económico-social de la región.