Desde agosto, la ciudad norteña tiene el boleto urbano de colectivos más caro de todo el país y ahora los concejales del Frente de Todos van por la suspensión del aumento.
Por una ordenanza sancionada en febrero, desde de agosto Tartagal actualizó por segunda vez el precio del boleto del transporte público de pasajeros y saltó de $70 a $90, convirtiéndose así en el precio más caro de todo el país.
Después de la polémica desatada la semana pasada, concejales del Frente de Todos adelantaron que buscarán sancionar una nueva ordenanza que establezca un precio inferior porque “es impagable para un trabajador”.
El concejal Ernesto Restom consideró que “es un servicio deficiente porque los colectivos están en mal estado y no llegan a cubrir las frecuencias horarias» y cuestionó que tenga el precio más caro del país pero un radio de cobertura de apenas 10 kilómetros.
Aunque se mostró consciente de que el radicalismo es mayoría en el Concejo, adelantó que pedirá la suspensión del aumento atento a que la Legislatura de la Provincia debate una ley de transporte.