Manteros, carreros y vendedores ambulantes se manifestaron este miércoles en contra del Gobierno de la Ciudad de Salta pidiendo un lugar adecuado para desarrollar su actividad.
La pandemia puso de relieve el grado alto de informalidad laboral y económica en la provincia de Salta, generando un impacto negativo transversal a todos los sectores, es por eso que cada actividad busca protegerse hasta el mínimo detalle de factores que puedan mermar recursos.
Los comerciantes del centro salteño se manifestaron en los últimos días contra la actividad ejercida en las peatonales por los denominados «manteros», que no son más que representativos de un sector social vulnerable.
El trabajo de manteros representa el sustento diario de cientos de salteños que dependen de lo que puedan recaudar en su precaria venta diaria. Por este motivo, este miércoles cortaron la avenida Paraguay para protestar y solicitar al gobierno a cargo de Bettina Romero, un lugar adecuado para vender sus productos. A la protesta se sumaron vendedores ambulantes y carreros.
Por otra parte, la queja de los comerciantes salteños también es justificada: este año continuaron pagando impuestos provinciales, nacionales y municipales en el lapso que pudieron trabajar, con ventas que cada día se reducen más y un futuro que parece incierto.