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La donación de sangre y de plasma en el centro de la atención pública

En momentos en que la donación voluntaria de sangre y de plasma tiene estadísticas negativas, el proceso ingresó en un marco de escepticismo público ante denuncias de negociados e incompatibilidades, que se agravó esta semana con la imputación por parte de la Justicia a la titular del Centro de Hemoterapia.

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores imputó a la médica Betina Saracino, por la comisión del delito de negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función.

Para avanzar en la imputación, el fiscal tuvo en cuenta que en su carácter de Directora del Centro de Hemoterapia Regional de la Provincia de Salta, Saracino incumplió la normativa que regula las incompatibilidades y prohibiciones de los funcionarios designados en cargos políticos y designaciones con carácter de autoridad superior del Poder Ejecutivo fuera de escalafón (Según Decreto Nº 998/08).

El fiscal considera incompatible con sus  intervenciones como Directora de la empresa privada denominada Servicio de Medicina Transfusional Salta, -entidad habilitada para la realización de servicio transfusional hospitalario-, en la recepción de unidades de hemocomponentes.

La investigación fue iniciada de oficio como “Noticia Criminis”. En este marco se requirió informe al Centro de Hemoterapia Regional, al Instituto Provincial de Salud, a la Clínica Virgen de Urkupiña y al Ministerio de Salud, solicitando copia del convenio celebrado con empresa Servicio de Medicina Transfusional, del Expediente de dicha empresa, constitución y sus posteriores modificaciones.

El 8 de enero pasado se designó a Betina Andrea Saracino como Directora del Centro de Hemoterapia, organismo que tomó un valor inesperado durante la pandemia por coronavirus al entrar en la atención médicos y pública la administración de plasma para la recuperación de pacientes.

En su perfil de LINKEDIN, figura como Directora Médica de “Medicina Transfusional Salta”, desde agosto de 1988 hasta la actualidad. Los informes técnicos confirmaron que la empresa funciona en el establecimiento de CENESA, donde se confirmó  la responsable es Saracino.

Otro informe del Centro de Hemoterapia Regional revela que entre el 1 de agosto y el 6 de octubre de este año, el Centro Regional de Hemoterapia envió 36 unidades de plasma convaleciente Covid, de un total de 309 unidades de hemocomponentes, al “Servicio De Medicina Transfusional Salta”.      

Para imputarla, Flores consideró que “se desplegaron todos los elementos que constituyen el delito imputado, violentándose el bien jurídico protegido, que es la administración pública y que se comprobó, prima facie, la existencia de una situación simultánea de parte y de funcionaria, a sabiendas que se está interviniendo en un contrato u operación como funcionaria pública y la voluntad de tomar intervención en ellos, a la vez, de forma privada”.

El descargo

La funcionaria concurrió a la audiencia acompañada de un abogado particular y presentó su declaración por escrito.  Betina Saracino, manifestó que  “todo está en manos de la justicia, evidentemente no existe tal incompatibilidad, de hecho todos los directores que han estado acá han tenido actividad privada”.

La médica añadió que «hay mucha desinformación al respecto», en referencia a la transfusión del plasma y de qué se trata la hemoterapia. Aclaró que es una especialidad médica, que no es lo mismo que hematología y que ellos no son bioquímicos sino médicos. 

El abogado de Saracino, Marcelo Escudero, señaló que la imputación surgió como noticia criminis, que la Fiscalía recogió de un medio web. «A partir de eso se hizo la imputación. Entendemos que no existe tal incompatibilidad. En primer lugar el estatuto del empleado público establece el bloqueo del título a partir del cargo de subsecretario de Estado y no a partir de director», sostuvo.

Con relación a su actividad privada, indicó que «como ella tiene un laboratorio privado de transfusión hemos dejado en claro cómo funciona el sistema, porque el sistema es bastante complejo y esto a los fines de que la población también entienda que no es un negocio, la sangre no es que se cobra, lo que pasa es que a partir de la Ley Nacional de Hemoterapia, la sangre se dona en el Centro de Hemoterapia, pero la transfusión al paciente se realiza a través de los centros privados». 

 

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