El palista de Olavarría cumplió su sueño de competir contra los mejores en su disciplina. El oro fue para el húngaro Balint Kopasz.
Fue otra jornada inolvidable para la delegación argentina. Después del heroico triunfo de Las Leonas frente a Alemania en el hockey sobre césped, y a la espera de las presentaciones de los seleccionados de vóley y básquet, Agustín Vernice se clasificó para la final A de la modalidad K1 1000 metros masculino de velocidad, donde cumplió el sueño de competir contra los mejores en su disciplina y se llevó un diploma en el canotaje de los Juegos Olímpicos Tokio 2020.
En el denominado Canal Sea Forest de la capital japonesa, y por la definición de la competición, el palista bonaerense, de 26 años, registró un tiempo para la distancia de 3 minutos, 28 segundos 503 centésimas. El oriundo de Olavarría se ubicó octavo a 7s.860/1000 por detrás del húngaro Balint Kopasz, quien dominó de a principio a fin la carrera y concretó una marca de 3m. 20s. 643/1000, lo que significó la medalla de oro y un nuevo récord olímpico. Además del europeo también se subieron al podio su compatriota Adam Varga, quien se quedó con la presea de plata a 1.788 y el portugués Fernando Pimenta, quien se llevó el bronce a 1.835.
“Hice una estrategia que funcionó mal. Las condiciones de la pista hicieron que haya un récord mundial. Intenté hacer una salida más rápida y creo que podría haber conseguido un resultado mejor. La ambición de ir por más y buscar el sueño de una medalla me dejó esto. Tenía que haber corrido más tranquilo como lo hice en otras carreras. Lo debo tomar como un aprendizaje para mantener una motivación en un nuevo camino hacia París”, dijo el bonaerense en declaraciones brindadas a la TV Pública en zona mixta.